"Chase Insteadman, un apuesto e inofensivo producto de la escena social de Manhattan, lleva una vida de ocio gracias a las rentas que recibe de su breve carrera como actor infantil. Además, últimamente ha vuelto a la vida pública por una tragedia que los medios no se cansan de cubrir: su amor de la adolescencia y prometida, Janice Trumbull, está atrapada en la Estación Espacial Internacional, desde donde le envía arrebatadas cartas de amor. La vida de Chase cambia radicalmente cuando conoce a Perkus Tooth, un ermitaño virtual y enigmático que es adorado en los círculos más modernos por su arte callejero de vanguardia y sus caústicos comentarios. Su labia incendiaria y su voraz paranoia arrastran a Chase a un Manhattan completamente diferente, un Manhattan distópico y sesgado en el que la verdad es a gusto del consumidor."En esta novela Jonathan Lethem cuestiona y retuerce la noción de realidad convenientemente para hacernos ver que no todo es lo que parece. Nos muestra una ciudad que está experimentando situaciones extrañas pero hasta cierto punto verosímiles. Nos hace dudar de los hechos, porque cada suceso que relata van poniendo en entredicho lo que nos había contado con anterioridad. Para ello desgrana de cuando en cuando pequeñas pistas sin importancia aparente, pero que cobran sentido en los capítulos finales. Por desgracia, ni las revelaciones ni las conclusiones alcanzan el nivel suficiente de ingenio para que en la cabeza del lector se produzca ese destello placentero de complicidad que supone reconocer una buena historia.
La verdad es que con esta breve impresión mía podría pensarse que la novela tiene algo de dickiana. Bien, es inevitable reconocer claras influencias de Philip K. Dick en personajes, situaciones y el fondo de la acción. Sin embargo, si a alguien me ha recordado es a Charlie Kaufman. Los guiones de éste último (Being John Malkovich, Adaptation o Eternal Sunshine of the Spotless Mind) son el rutilante equivalente cinemátográfico de este intento fallido de crear una trama intrincada y compleja, de tintes fantásticos, que ponen en entredicho la realidad que creemos percibir, o más bien fabricar a nuestra conveniencia. En mi opinión la obra de Lethem deja mucho que desear. Se sostiene capítulo tras capítulo en las rarezas y peculiaridades del coprotagonista friki, Perkus Tooth. Sus idas y venidas entre marihuana, constantes referencias a la cultura pop más underground, mundos virtuales y conspiranoias (una retahíla inagotable de pamplinas, por si no ha quedado claro), se van sucediendo sin descanso y sin que sepamos muy bien a dónde se dirigen ni él, ni la trama, ni el protagonista, que viene a ser un pelele sin voluntad propia que corretea detrás suyo. Además la presencia de Manhattan como elemento de fondo es omnipresente y para mi gusto cansina. Seguro que al lector de la Gran Manzana se excita sobremanera con tanta referencia al Lower y el Upper East Side, la Ochenta y cuatro Este, la Segunda Avenida, Park Avenue y sutilezas como 'me pongo nervioso cuando las calles de Manhattan alcanzan los tres dígitos', pero a mí, que no me dicen nada, se me hacen pesadísimas. En fin, casi 30,00€ que me gasté en este tocho, que a pesar de las cuatrocientas y pico páginas se hace muy ligero, porque en el fondo no es más que un entretenimiento insustancial e intrascendente. Y todo por la mención a un 'Manhanttan distópico' en la reseña editorial. Es que no aprendo. Tenéis más reseñas en Desde la ciudad sin cines, La medicina de Tongoy y Un libro al día. Los dos primermos os contarán todo lo contrario a lo que acabáis de leer, pero para mi tranquilidad, en ULAD la valoración final es 'sumamente irregular novela'.
5 comentarios:
Pues si gastaste 30 pavos en este, no veo razón para no comprar los cuentos de Ballard, jajaj.
Por eso no me gusta la novela (sobretodo la contemporánea). Suele ser un cuento inflado. Lo peor es que uno paga por ellos y la suma, como en tu caso, no suele ser baladí.
Un saludo.
@Kirilov Myshkin: Visto así parece lógico, pero lamentablemente tengo que limitar el número de libros que compro por ese importe (o superior) porque la nómina da para lo que da.
;)
La única novela que he leído del autor me pareció sumamente irrgular, aunque interesante. Veo que es marca de la casa.
A mi me pareció un buen libro aunque he de reconocer que le pueden sobrar cien páginas centrales que alargan la historia sin necesidad. En lo que si coincido es en lo abusivo del precio. Yo también pagué en su día los 30 eurazos a mondadori... ansia por no esperar la edición de bolsillo o pereza por no disponer de una biblioteca cerca.
Saludos.
@Palimp: Aunque ahora tenemos los blogs para escuchar opiniones más o menos independientes sobre cada libro que se publica, a la hora de la verdad siempre entra en juego el factor suerte.
@Pablo G: Me veo reflejado totalmente en esa ansiedad por pillar un libro a pesar del precio desorbitado para que luego se pase meses esperando en la estantería. Aún tengo pendientes varios casos similares, algunos no con meses de espera, sino años ;)
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