Invernáculo es una novelilla de aventuras totalmente intrascendente, sosa y sin gracia ninguna. Escrita como para adolescentes ávidos de acción sin ningún fondo ni preocupación por el argumento. El hecho de que tenga un premio (el Hugo de 1962 a la mejor colección de relatos cortos) hace que me cuestione profundamente el significado de los premios literarios.
La acción transcurre en la Tierra en un futuro muy, muy lejano, tanto que se ha detenido la rotación de la misma. Ello ha provocado que en el lado donde siempre brilla el sol, las plantas hayan pasado a ser los seres dominantes. Han evolucionado de mil formas, son móviles, son enormes, en su mayoría son agresivas y han diezmado el reino animal. Solo quedan algunos humanos involucionados que viven en pequeños clanes y han tenido que adaptarse a la vida en la ramas de los árboles; también hay algunos insectos mutantes hipertróficos mezcla de ésto y aquello. Así que en la novela (en realidad un fix-up de cinco relatos/novelas cortas, via Wikipedia) asistimos a las andanzas de un grupo de estos humanos, con la lupa puesta en Gren, un muchacho ya en edad fértil, hecho que en esa cultura le otorga un estatus especial por tener la capacidad de poder engendrar niños, algo difícil de encajar si consideramos que Brian W. Aldiss imagina una sociedad tribal matriarcal. Total que la narración va dando tumbos, con gente muriendo aquí y allí, incidentes con extrañas bestias por un lado y por otro, viajes de norte a sur y de este a oeste, por tierra, mar y aire, etc. etc. Nada de lo cual, por cierto, tiene absolutamente ninguna importancia en la trama porque no hay trama, sólo un contínuo relatar correrías y peligros, ingenuos a más no poder en mi humilde opinión.
Al final al autor se le acaba el fuelle y la historia finaliza de la misma manera que se ha desarrollado: insustancial, trivial, puerilmente. En lo que llevo de blog, solo recuerdo una novela tan absolutamente inane y penosa como ésta: Pensad en Flebas de Iain M. Banks, y casualmente ambas venían recomendadas por dos amigos diferentes con un historial interminable de referencias en la ciencia-ficción. Para que te fíes de los amigos. Que conste que yo al Aldiss le tenía por uno de los popes de la New Wave, pero por lo que parece el título que me ocupa hoy es anterior a su vinculación a dicho movimiento. En fin, intentaré afinar más la próxima vez que aborde a este autor.
Tenéis más reseñas en Bibliópolis y Universo de Ciencia Ficción. La primera es bastante crítica; la segunda, es muy extensa y realiza un análisis extenuante de la novela, total para justificar lo injustificable.
Los lunes de Anay. Asas...
Hace 6 horas
5 comentarios:
Lo comenté hace mucho y no me pareció malo... pero tampoco es que recuerde mucho del libro.
Si quieres un libro new age del autor 'A cabeza descalza' Y luego me cuentas (Si te lo acabas).
@Palimp: Pues justo ésa en concreto ando buscando. Ahora me dejas con la duda, porque tb. la tengo recomendada.
"Invernáculo" aparecía en la selección de las cien mejores novelas de ciencia ficción que hizo David Pringle, un crítico que daba mucha importancia al estilo (ese tipo de críticos que disfruta con adjetivos como "opalescente" o "tumultuoso"). Aldiss era uno de sus autores favoritos. Por su culpa, estuve a punto de comprarme "Invernáculo" varias veces. Me alegro de no haberlo hecho porque lo poco que he leído de Aldiss la verdad es que no me parece para tanto.
Yo estoy muy de acuerdo con la crítica. Me parece una novela sobrevaloradísima, destartalada y profundamente aburrida.
@el convincente gon: Yo es lo primero suyo que leo y me parece totalmente prescindible. Espero que su paso a la New Wave dé un poco más de contenido a sus novelas, aunque después del comentario de Palimp ya no sé qué pensar.
@JJ.: Gracias por tu comentario, se agradece ver que no estoy solo en mi apreciación sobre una de las (supuestas) cien mejores novelas de ciencia ficción.
Publicar un comentario