¿Alguien, repito, alguien pensaba que este año no iba a caer uno de los vetustos libros amigos de Bruguera dedicados a la fantasía y la ciencia ficción? ¿Alguien, pregunto, alguien creía que yo no estaba esperando ansiosamente el verano y el mes de agosto para leer y comentar en el blog alguno de los que tengo pendientes? No han acabado los interrogantes, pero de momento allá van mis impresiones sobre los relatos cortos incluídos en el volumen 2 de esta colección.
Al primero de ellos, "El Cebo" (Bob Leman), se le agradece la brevedad, porque la historia del vendedor de un elixir de la inmortalidad obtenido gracias al matrimonio con una mujer que llegó con esta ambrosía de otra dimensión te deja estupefacto por lo estúp***. ¿Alguien había oido hablar del autor con anterioridad? Pues eso. Imposible aprobar el cuento de Mr. Leman (3).
Sin embargo el siguiente, "La Parra" (Kit Reed), tiene cierto interés por lo siniestra e inquietante que resulta esa enorme vid que devora la vida de sus cuidadores. ¿Figuradamente, o es que se los zampa de verdad?. Además, transmite un desasosiego final muy interesante al dejar entrever que una oscura organización vela por el bienestar de la planta. Le pongo un bien a Mr. Reed (6).
"La Chica de O'Grady" (Leo P. Kelley), es una historia muy simple pero terriblemente emotiva. En ella se nos presenta a la muerte no como un ser malévolo que nos hace sufrir, sino como un ente que nos va a reunir con todos aquellos a quienes hemos querido a lo largo de nuestra vida. Para ello organiza una gran fiesta a la que asisten todos ellos, de forma que poner fin a nuestra estancia en este mundo es, ¿por qué no?, motivo de alegría. Un notable para el señor Kelley (7).
"La Mansión de las Rosas" (Thomas Burnett Swann) es el cuarto y el más extenso. Como en el resto de libros de esta colección que llevo leídos, nos vemos obligados a asistir a una flojísima fantasía medieval que contiene un batiburrillo insostenible de templarios, cruzados, nobles adolescentes que se hermanan con jóvenes plebeyos y para finalizar, mandrágoras. ¿Será que no me gusta esta temática? ¿Será más bien que aún no he leído algo decente clasificable como tal? Thomas, Thomas, Thomas, te llevas un suspenso bajo (2).
Para compensar el disgusto anterior, el siguiente relato, llamado "El Primer Postulado" (Gerald Jonas), ha resultado ser una agradable sorpresa de inspiración claramente ballardiana. En un futuro no muy lejano la humanidad ha vencido a la muerte gracias a los descubrimientos del Dr. Polsaker, reunidos en forma de postulados y siendo el primero de ellos el más contundente -y el único mencionado, por cierto-: «La muerte es una enfermedad curable». Lamentablemente tras unas décadas engañando a todos los achaques conocidos y a la vejez, se han empezado a producir fallecimientos por infecciones pulmonares en una pequeña isla frente a la península de Yucatán. Por su logrado tono distópico y su preocupación por dar credibilidad a los aspectos médicos, se lleva la mayor nota de toda la compilación: enhorabuena, Sr. Jonas por su notable alto (8,5).
Con los dos últimos no ha habido mucha suerte. "Luana" (Gilbert Thomas) es una tontuna insostenible sombre un micólogo pichabrava con patéticas aspiraciones artísticas y una espora llegada del espacio que una vez cultivada, da como resultado un super champiñón de 2 metros y pico. Bajo el hábil cincel del émulo de Picasso, la seta termina convirtiéndose en una estatua femenina tamaño real a quien un cirujano amigo suyo le construye una vagina. Sí, sí, habéis leido bien, no es broma. ¿Qué nota se le puede dar a algo así? Como evaluador responsable que soy, exigo hablar con los padres del autor antes de calificarle.
Para finalizar "Planeta «Casi» Habitable" (Robin Scott) es supuestamente -subrayo verbalmente el "supuestamente"- un relato de tono humorístico sobre una civilización extraterrestre que a causa de la superpoblación de su mundo, decide lanzar sondas exploradoras al espacio con la intención de localizar planetas habitables. Una de ellas llega a la tierra y termina cerca de una carretera muy transitada, así que los resultados de sus análisis atmosféricos no son nada halagüeños. Primero, yo no le he visto la gracia por ningún lado, segundo, la conclusión no aclara nada. Por tanto, también suspenso bajo para Mr. Scott (2).
¿Hay ganas de más? Pues me temo que esto es todo por el momento. Dentro de un año, una nueva entrega.
Pedro Juan Gutiérrez: Anclado en tierra de nadie
Hace 5 horas
2 comentarios:
Pues si vas a año por libro tienes hasta que te jubiles y más allá...
@Palimp: Si los gobiernos de turno siguen elevando la edad de jubilación quizás la termine antes, ¡jojojojo!
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