Esta es mi primera incursión en la narrativa breve del Nobel de literatura de 1983.
El dios Escorpión incluye tres novelas cortas, o al menos así se indica en la propia edición. Los títulos de las mismos son:
- 'El dios Escorpión'. El Faraón de Egipto fracasa en su divina tarea de controlar la subida del Nilo. Su bufón está destinado a ser enterrado junto a él, pero se revela a su destino y rechaza la vida eterna que le espera en su tumba.
- 'Clonc Clonc'. Una pequeña tribu prehistórica tiene su asentamiento en la selva. Los hombres son cazadores, las mujeres guardan las chozas mientras ellos salen de batida. Uno de ellos está herido y es víctima de crueles bromas por parte de sus compañeros. Rechazado y abandonado, regresa al poblado y sorprende a sus compañeras en un extraño ritual de tintes mágicos.
- 'El enviado especial'. Un inventor griego consigue una audiencia con el César y le convence para que financie algunas de sus creaciones, que prometen revolucionar campos tan dispares como la gastronomía, el transporte, las comunicaciones y la guerra.
De estos breves resúmenes se puede deducir que hay una clara ambientación histórica en todos ellos. De hecho,
William Golding destaca por su maestría a la hora de transportarnos a tiempos remotos y conseguir que nos metamos en contexto. Así, podemos sentir el sol abrasador en el valle del Nilo, la vida salvaje en la jungla o los maravillosos paisajes mediterráneos del Imperio Romano. Los tres relatos tienen un destacado trasfondo filosófico, pues todos ellos tratan las contradicciones humanas de una manera u otra. El autor británico expone en estos tres textos breves unas historias preciosas sobre temas que han preocupado al ser humano desde el origen de los tiempos, cuya validez universal y atemporalidad quedan demostrada en el momento que consigue conectar con el lector. Conflictos entre razón y mito, entre nuestro yo racional y nuestro lado más salvaje y primitivo. Las incoherencias en nuestro carácter y comportamiento, que nos hacen capaces de realizar los actos más abyectos, pero también los gestos más sublimes. Los miedos y debilidades inherentes a nuestra naturaleza, esa perversa herencia genética de nuestros ancestros que en lugar de protegernos nos convierte en nuestros peores enemigos.
Soy consciente de que me ha quedado una reseña un poco críptica, pero prefiero no dar más pistas y que seáis vosotros mismos quienes disfrutéis este libro. Se lee en un par de sentadas pero lo que es yo, lo he disfrutado en todas y cada una de sus frases. ¡Pero, pero, pero!, como cada lector es un mundo, os dejo a continuación las impresiones de
Cuchitril literario sobre esta joyita. Ya os adelanto que no se ha quedado tan contento como yo, más bien al contrario. Sin embargo en
Tu nombre en la portada están más alineados conmigo.
Me encantan las colecciones cortas, muchas veces son mejores 3-4 cuentos que 15 en un sólo libro. A darle su oportunidad apensa lo encuentre, gracias por la reseña ;)
ResponderEliminarMe gustó el último, todavía lo recuerdo. Del resto ni me acuerdo de la trama :)
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