Con la fama de intrigante y misteriosa que tiene Daphne du Maurier, por un lado, y ese título y portada por otro, cuando vi este tomo en una librería de segunda mano no me lo pensé ni un momento. La lectura, sin ninguna referencia adicional, se prometía angustiosa, inquietante; mucho terror psicológico y coqueteos con lo inexplicable. No sé, algo así como una joven pareja de recién casados que encuentra en unos anticuarios de Blackfriars una copa tallada que resulta estar maldita porque algún noble perverso, sádico y cruel bebió en ella la sangre de una joven doncella a la que robó su dignidad y su virtud tras haberla vejado, ultrajado y asesinado siguiendo rituales que no se pueden poner por escrito para evitar que algún incauto vuelva a invocar fuerzas oscuras e inmanejables. Y después de darle a la copa un lugar de honor entre su colección de antigüedades, la pareja que empieza a tener deseos cada vez más incontrolables de incorporar prácticas BDSM en sus juegos de alcoba. Látigos, máscaras de cuero y cruces de San Andrés instaladas en el sótano convertido en una mazmorra. Bueno no estoy seguro de que esta fantasía mía sea muy del estilo de esta autora británica, pero dan ganas de leerlo, ¿a que sí? Pues nada que ver.
'A través de la tormenta', título engañoso donde los haya, que nada, pero nada tiene que ver con el argumento ni con el original 'The glass-blowers', es la saga familiar de unos sopladores de vidrio franceses desde mediados del S. XVIII hasta principios del S. XIX. Aunque en realidad la trama se podría resumir simplemente a la Revolución Francesa vista desde provincias. Porque por lo menos en eso es original, ya que la acción no transcurre en París sino en diferentes ciudades y pueblos del Valle del Loira, en los departamentos de Sarthe y Loir-et-Cher.
Será Sophie Duval, la hija mayor de Mathurin Busson y Magdelaine Labbél, quien de forma retrospectiva escribirá esta narración. Lo hace para dar a conocer a uno de sus sobrinos la verdadera historia de su hermano Robert, el primogénito. En este folletín de tintes históricos conoceremos a Robert, fantasmón, oportunista y chaquetero; Pierre, idealista y firme defensor de la filosofía de Jean-Jacques Rousseau; Michel, la oveja negra de la familia; y Edmé, la más joven de las hermanas, con los intereses y habilidades que en aquellos años solo se esperaban de los hombres. A ellos se suman sus padres y tíos, fundadores de la dinastía de artesanos del vidrio, los cónyuges, suegros, hijos, sobrinos, etc. etc.
La historia en sí no está mal. Tampoco es que me haya sentido decepcionado por haberme encontrado con este pastel cuando me apetecía una novela de miedo. La realidad es que el texto no destaca por nada en particular, aunque entretiene y se lee con facilidad. Pero no es más que una serie personajes de distinto pelaje, perfil e inclinaciones que se suben al carro de la Revolución Francesa y van experimentando cambios según se desarrolla la misma. Todo muy lineal. Y muy didáctico. Un entretenimiento que según se deduce de los agradecimientos que du Maurier incluye antes de empezar el libro, podría venir inspirado por la historia de sus antepasados, los Busson. Recomendado para los amantes de la novela histórica. Yo no soy muy aficionado a ese género pero con todo y eso, me lo he terminado medianamente satisfecho.
Cuento con el mismo ejemplar de la foto que usaste para ésta reseña, nuevamente agradecido por encontrar una opinión sobre un título que hace tiempo le tengo el ojo encima. Como señalas que es mas recomendable para amantes de la novela historica, sin yo serlo, igual me convenció que te entretuviera y obviamente por tratarse de una de mis escritoras predilectas, sé que valdrá la pena darle la oportunidad.
ResponderEliminar@Escritor anubarrado: Efectivamente un libro recomendado para los amantes de la novela histórica. No me cuento entre ellos, pero en cualquier caso ha resultado una lectura entretenida. Saludos.
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